Pepe Espaliú nació en Córdoba en octubre de 1955. En 1974 se trasladó a Barcelona para estudiar en las Facultades de Filosofía y de Geografía e Historia. También asistió a las clases de la Escuela Massana y entró a formar parte de diversos colectivos artísticos de esa ciudad, desarrollando exposiciones y performances de temática conceptual. Más tarde se trasladó a París, donde bajo la influencia del movimiento Figuration libre volvió a la práctica de la pintura.
En 1983 se integró en el grupo que, desde Sevilla, editó la revista Figura (1983-1986), y a partir de la exposición colectiva Sevilla: Ohne title (Galería La Máquina Española, 1986), pasó a formar parte de los artistas de esta galería sevillana, dando comienzo una nueva y corta aventura en años pero densa en resultados artísticos.
En 1986 pasó a residir a Sevilla, donde inició un ciclo de pinturas con fuerte connotación simbólica (mediante imágenes de ojos, espinas, jeringuillas, cruces gamadas,…), y colores oscuros. Dos años después se trasladó a Madrid y este cambio vino a coincidir con el abandono de la pintura, dedicándose de lleno al dibujo, la obra sobre papel y la escultura. Aunque su temática estuvo siempre marcada por intensas referencias personales (como los discursos sobre la identidad y los conflictos con su naturaleza homosexual y un sentido sadomasoquista del placer), será a partir de este momento cuando estas percepciones y símbolos se manifiesten de forma más evidente e insistan obsesivamente sobre lo prohibido, lo velado y lo diferente. Así se aprecia en las series Glovemaking, Patrones, Máscaras y Santos, todas realizadas a lo largo de 1988. Las dos últimas iniciarán sus trabajos escultóricos.
En 1990, y mientras residía en nueva York, tuvo conocimiento de su condición de enfermo de SIDA. Intentando distanciarse de la enfermedad se desplazó a México, pero decidió volver a España e implicarse en la acción social a favor de estos enfermos. Es el momento de sus esculturas denominadas Carrying, las jaulas ensambladas y las diferentes variaciones realizadas con muletas, que cerrarán su ciclo creativo.
En San Sebastián, e impartiendo un taller, ideó la acción Carrying, en la que era portado por dos personas por las calles. Esta acción adoptaba el modelo de escultura social propugnado en su día por Joseph Beuys al tiempo que evocaba la ayuda que los colectivos gays de Nueva York (ACT-UP) prestaban a los enfermos cuando salían del hospital. El 1 de diciembre de 1992 se repitió esta acción en Madrid, en un recorrido que iba desde el Congreso de los Diputados hasta la entrada del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, concitando un gran interés social y mediático.
En el verano de 1993 se desplazó a Arnheim (Holanda) donde realizó la performance El nido durante el festival Sonsbeek. Murió en Córdoba poco después, el 2 de noviembre de 1993.